1569:
REPRESIÓN ESPAÑOLA EN LAS PARCIALIDADES DE
HATUN RUKANA Y LARAMATI
Por: Edmundo Guillén Guillén
Mientras
el gobierno de García de Castro lograba en 1566 neutralizar los planes
bélicos de Titu Kusi Yupanqui, representante del reducto patriota
de Vilcabamba, con la Capitulación de Acobamba, el Cabildo eclesiástico
del Cusco se alarmaba con la denuncia del vicario de Parinacochas,
clérigo Luis de Olivera, según el cual una “yerronía e idolatría”
se extendía probablemente desde la ciudad de Chuquisaca a la de Lima,
principal enclave europeo en el Perú.
De inmediato, el cabildo cusqueño, por estar la sede episcopal vacante,
nombró al clérigo Cristóbal de Albornoz para que con habilidad y persuasión
reprimiese a los dirigentes y corifeos de esta “nueva seta y apostasía”,
desatada en las provincias del Cusco, Arequipa y Huamanga, naturalmente
con el discreto apoyo militar del gobierno colonial (Millones. 1971;
3/ 29).
Albornoz y su intérprete, el padre Jerónimo Martín, iniciaron la visita
de Huamanga y sus provincias en 1569 (JSA. 196. LVI-I; 35), recorriendo
las de Soras, Rukana Antamarka, Hatun Rukana y Laramati. Refieren
testigos que durante esta campaña contra la ideología religiosa andino-Inka,
se destruyeron más de “veinte y mil guacas” y se castigaron a más
de “ocho mil” personas de esta “seta y apostasía” (Millones 1971;
2/20, 2/54) y que los predicadores de las guacas, para vindicar su
prestigio y culto, habían “tomado un género de bayle que intitularon
taqui ongo, por otro nombre ayra” (Albornoz, JSA. 1967. LVI-I; 36).
A decir de varios testigos, Albornoz procedía a refutar el “error”
ideológico religioso de los predicadores o kunaq, tras lo cual mandaba
quemar las “guacas”, haciéndolas cargar por sus propios “sacerdotes,
ministros y hechiceros” (Millones. 1971; 1/22). Y en lugar de ordenar
la muerte de éstos, como no quisiese consagrarlos en un martirologio,
utilizó como arma terrible el escarnio público, procediendo a “demostrar”
la falsedad de sus creencias y la impotencia de sus deidades. Existen
testimonios respecto a que a los presuntos hechiceros o hechiceras,
después de hacerlos caminar encorazados (puestos en la cabeza un
cucurucho de papel pintado) y emplumados, eran trasquilados ya azotados
con cincuenta latigazos y se daba otros castigos a sus cómplices y
seguidores. Entre estas penas, figuraban los destierros a Huamanga
y al Cusco, el pago de cierta cantidad de dinero, los trabajos forzados
para la construcción de las iglesias locales y servicios personales
para beneficio de los curas doctrineros.
Según el padre Pedro Barriga, testigo de estas persecuciones, uno
de los prin-cipales “dogmatizadores” fue un tal Juan Chono o Choqne,
que “traya consigo” una deidad que “ellos no veían” (Millones, 1971;
3/ 28) y que apresado en localidad de Laramati, fue conducido preso
a la ciudad del Cusco. Por referencias incidentales, se tiene noticia
de otros predicadores, pero sin sus nombres. Por ejemplo, el testigo
Pedro de Contreras, dice que vio a dos mujeres arrepentidas nombrarse
“Santa María y Santa María Magdalena” (Millones. 1971; 2/46); Diego
de Romaní citó a ciertas mujeres llamadas “Santa María y Santa María
Magdalena ” (Millones. 1971; 2/62); Juan de Mañueco dijo que el kuraka
de su encomienda apresó a “dos hombres” y los envió a Huamanga (Millones.
1971; 2/68) y C. de Molina señaló más explícitamente que en las parcialidades
de “Soras, Apcara y Lucanas”, se hallaron “gran suma de dogmatizadores
y maestros del taquiongo” y que los más principales fueron “dos hombre
y una mujer”, sin referirse a sus nombres tal vez para que no quedaran
como los héroes religiosos de estas localidades (Millones. 1971;
1/22).
A pesar de la cautela de los testigos en omitir el nombre de los más
destacados kunaq de este movimiento anticristiano, en la relación
de los kuraka y señores principales castigados en cada parcialidad
y pueblos es posible identificar a los héroes locales, que soportaron
con dignidad y leales a su ideología, el escarnio, el destierro y
otras penas, en defensa de sus creencias religiosas y enfrentando
a la represión ideológica e iconoclasta de los severos y ortodoxos
visitadores españoles.
La represión religiosa de 1569 no puso término a las ancestrales creencias
de estas parcialidades. Se sabe por Guaman Poma, que años después
recorrió los pueblos de esta jurisdicción, que a despecho del celo
de los curas doctrineros, los runas, aunque cristianizados, seguían
severamente a sus guacas y penates familiares, en sincretismo que
dura hasta nuestros días.
Con el trágico final del primer intento de reconquista del Perú Inka,
destruido el reducto de Vilcabamba y decapitado en 1572 el último
de los Inkas, Thupa Amaro, el Perú perdió su soberanía y fue desecha
su dirigencia política. Hasta que después de varios intentos de reconquista,
expulsó a los españoles de esta tierra, el año 1824.
En lo religioso, la lucha continuó silenciosa y dramáticamente hasta
las primeras décadas del siglo XVII, en que al parecer terminó la
resistencia organizada de la iglesia andina contra la legión de extirpadores
de las idolatrías. Parece que, cambiando de estrategia, adoptó conciliadoramente
al dios extranjero, pero sin abandonar los dioses propios, en un sincretismo
cósmico andino-cristiano que perdura con mayor o menor influencia
hasta nuestros días .
La historia de esa guerra ideológica religiosa está descrita con erudición
y con acertados análisis, destacando principalmente Pierre Duviols
en su autorizado libro “La destrucción de las religiones andina (durante
la conquista y la colo-nia)” (París, 1977).
Transcribimos a continuación una reseña ilustrativa del nombre de
las personas que fueron castigadas por visitador Cristóbal de Albornoz
en los pueblos de las parcialidades de Laramati , Hatun Rukana , Hanan
Rukana y Hurin Rukana, que figuran en el extracto de 1584, tomado
directamente de los originales de la visita a estas parcialidades
hecha en 1569.
Según este documento, las penas más severas y afrentosas se impusieron
a los kunaq o predicadores de las guacas, acusándolos con el estigma
de “hechiceros o hechiceras”, después a los kuraka y a las personas
que habían apostado del cristianismo. En el artículo titulado “Descripción...del
repartimiento de Rukana Antamarka”, aportamos más datos sobre la represión
ideológica religiosa que se dio en los pueblos de esta parcialidad
y en la de Hatun Soras y Hurin Soras.
a. Provincias de Laramati, relación de personas castigadas:
1. Predicadores, acusados de presuntos hechiceros y hechiceras: a
servir “perpetuamente” en las iglesias del repartimiento: Diego Yaure;
Pedro Guaman Harpa; Beatriz Guacra Tiílla; Francisco Yaure; Pedro
Angas Vilca, más 9 personas.
2. Por apóstatas del cristianismo: a destierro de la localidad a los
monasterios e iglesias de la ciudad de Huamanga.
Pueblo de “Caroancho”: Alonso Guaman Vicho, Diego Asto Ananpala, Diego
Aucavincho y tres personas más.
Pueblos de “Guacguas”: Los kuraka don Antonio caso, don Cristóbal
Paucar Guacho y don Juan Caroancho, Pedro tomayco y agustín Guacra
y 12 personas más entre hombre y mujeres.
Provincia de Laramati: Leonor Vilca Chumpi, María Guacama, Pedro Guaoya
y 14 personas, cuyos nombre figuran en el original de la “Visita”.
Pueblo de “Allauca” (Llauta): Pedro Curo y 3 personas.
3. Kuraka y señores principales acusados de “cómplices” de la “seta”:
penados a perder sus “mancebas”: Don Cristóbal Paucar Cucho (kuraka
de Laramati): 14, Francisco Enesal: 2, don Hernando Quea Condor:
8 , Juan Carua suri 3, don Diego Guayo Paucar: 5, don Pedro caroa:
5, don Diego Parca: 7, don Cristóbal Taquia: 4, don Crstóbal Callo:
7, Alonso Guaman: 2, Francisco Curilla: 3, don Pedro Pomataya: 8,
don Antonio Caso: 2 y a don García Villacallapa: 1 manceba.
4. “Guacas” e “ídolos” destruidos y quemados, durante la “Visita”:
Laramati: 10 guacas llamadas Llamoca y Paucani, más 8 cuyos nombres
figuraban en el original de la “VISITA”.
Guacguas: 15 ídolos y guacas, donde “mochaban” (veneraban) los kurakas
don Cristóbal Paucar Cucho, don Joan Caroancho y Antonio Caso.
Caroancho: 8 ídolos y guacas, mochaderos o adoratorios de don Cristóbal
Callo Pasa y don Pedro Curaca.
Cacha (Ocaña): 17 guacas las que “adoraban” Francisco SS (sic) Poma
Guaman y Diego Pallalos.
Sonconchi: 4 guacas del kuaraka don Francisco Condor , (quemadas).
Uruysa: 7 guacas, también quemadas del kuraka don Diego Goauya Pau-car.
b.- Parcialidad de Hatun Rukana, relación de personas castigadas:
Por seguidores de la “seta y apostasía” (hombres y mujeres, muchachos
y muchachas): a la pena de destierro del repartimiento por el término
de “seis años”, algunos de ellos de manera específica.
-Desterrados y entregados a los sacerdotes para su catequización:
Joan Guaoya Gualda; Gonzalo Guamal; Francisco Asco y Pedro Cuntur.
-Desterrados por seis años del repartimiento: muchachos y muchachas:
Cristóbal Callapa Sauri; Alonso Una; Martín Vilcaparirucana; Isabel
Guaylla; Isabel Choma; María Quipima; Luisa Macuy; Francisco Ñusta;
Leonor Guaynay; Juana Quispillaoi y Francisco Chuqui Vilca.
-Castigados entre las personas sujetas a don Alonso Angasi: Don Juan
Calúhuillo; Pedro Alonso Curi Pisara; Isabel Curi Huarmi; Don Juan
Callapa; Francisco Yayca; Juana Curi Huarmi; Alfonso Runa; Inés Tin-tacaras;
Inés Guanay; Alfonso Pariona; Juana Quipillico; Isabel Guanay; Cristóbal
Pullca Guamal; Catalina Chumpi Halay; Juana Asto Guailla; Juan Caquia
Gualmi; Juana Astoma; Catalina Caraos Toma; Cristóbal Hacha; María
Mollolauca; Francisco Asto Rauca e Isabel Chumpi Monay.
-Castigados entre las personas a don Alonso Guaman: Alonso Yauli Mila;
Pedro Amasi; Leonor Caya; Juan Guaman Yamque; Juan Caquia Guarme;
Ana Casyama; Alonso Asto; Juan Hochama; Constanza Caroama; Juan Yongari;
Luisa Umina; Juana Pacuay; Diego Caraguana e Isabel Chumbi Monay.
-Castigados entre las personas sujetas a Alonso Pisarecopa: Juan Guamal;
María Acoma; Isabel Acoma; Pedro Copay; Juana Colcay; Isabel Oquima;
Francisco Guamal; Isabel Chacra; Juana Asto Monay; Juan Colcay;
Juana Chumpi; María Chumpima; Isabel Guayllarauca; Isabel Yara; Ana
Ñusta; Elvira Callama Lancazaras; Catalina Cumpima; Alonso Michca;
Juana Hachco y Juana Asto Cararoa.
-Castigados entre las personas sujetas a Francisco Chávez: Juan Yamque
Guamal; Pedro Alonso Pariona; Pedro Chuyco; Pedro Auqui Llallico;
Miguel Auqui Llallipa ; Miguel Quispe; Bartolomé Guaylla; Luis Malco;
Luis Yamque; Paucar; Francisco Caroa Coma; Martín Pusar; Diego Yaure
Manco; Pedro Mollo Guamani; Diego Quispe Aymara; Luis Guaman Pusa;
Diego Sacasa Chipana; María Mullo Chumpi; Diego Quincalla; Constanza
Carua Chuqui Juana Chuquilla; Juana Culminar; Constanza Checyma; Constanza
Tioma; Luisa Caroa Acoma; Catalina Ñusta; María Tiílla; Catalina
Chui Astoma; Inés Astomanay; Isabel Curi Pillco; Luis Cayoma; Elvira
Chequea; Leonor Yaucama; Catalina Guay-lla Checa e Inés Casima.
-Castigados entre las personas sujetas a don Cristóbal Uchuqui, Antonio
Guaman Lauca, Pedro Caxa y Tomás Vásquez Tomay (parte de ellos desterrados
del repartimiento): Francisco Pisara; Pedro Atalauca; Leonor Aguama;
Juan Sauri; Alonso Cazaraura ; María Sucia; Alonso Guaoya; Isabel
Chumpi; Isabel Mollo; Cristóbal Pisac; Ana Checya; Bárbola Asto Pillco;
Francisco Guaman Asto; María Chuquia; Isabel Guaylla; Alonso Poma;
Ana Chacana; Leonor Tinta; Francisco Aucalepo; Francisca Monay; Juana
Chacray; Francisco Carcuama y Juana Caroama
-Kuraka y señores principales acusados de cómplices de la “seta”,
pe-nados a perder sus mancebas: Don Francisco Chávez: 4, don Gonzalo
Callap: 3, don Juan Guancari: 6; Juan Uchiqui: 2 mancebas.
A los siguientes kurakas, les quitaron de tres a cinco “mancebas”:
Don Carlos Quea Poma; Don Gonzalo Nina Paucar; Don Francisco Uscapaucar;
Don Cristóbal Auqui Guamal; Pedro Alonso Pariona; Alonso Pisracoma;
Don Alonso Liquila; Don Juan Yamque Guamal; Don Alonso Chinque Chipana;
Don Francisco Guaman Aymara; Vasco Xuares Masco; Don Francisco
Yamquepaucar; Don Garica Chunqui; Don Francisco Pisari Guancari; Don
Juan Vilca Pisari; Don Quea Quispe; Don Alonso Guaman; Don Juan Pullca;
Don Alonso Gualle; Don Juan Pillco Rimachi; Don Antonio Guaman Rucana;
Tomás Vásquez Tomay; Joan Palomino Guamal; Don Juan Callapa; Francisco
Almazán y Don Juan Vilca Pisara.
c. Parcialidad de Hanan Rukana, relación de personas castigadas:
-Kuraca y principales, por “idolatrías” y “encumbridores”: “A peniten-cias
públicas descalzos y con sogas al pescuezo en una procesión y en
ciertas penas pecuniarias”: Don Guancari; Don Francisco Pisari Guan-cari;
Don Caxa Callapa; Don Alonso Guamal; Don Cristóbal Guaman Rauca; Don
Vasco Suarez Masco; Alonso Martín Pisaracopa; Don Yamque Guamal;
Pedro Alonso Priona; Don Francisco Chávez; Don Gonzalo Callpa; Francisco
Chávez; Don Cristóbal Chuqui; Don Antonio Guaman Lauca; Don Pedro
Caxa y Tomás Vásquez Tomay.
- Predicadores, acusados de presuntos“hechiceros y hechiceras”: a
ser y trasquilados, encorazados y emplumados: Juan Chuqui Vilca; Pedro
Ticla; Francisco Caquiguamani; Cristóbal Canchor; Juan Guamal; Isabel
Guaylla Chuqui; Alonso Atalauca Yaroguanca; Juan Guancari; Maria Lauca
Chuqui; Gonzalo Guaman Chucuna; Juan Nauinlauca; Inés Ca-quiama;
Gonzalo Guaman Chucuna; Francisco Pullo; Isabel Caroa Acampa; .Caquia
Chipana; ...Quispe; ...Caquia Chipana; Jerónimo Chu-qui Guaranga;
Juan Pilco Yaure y ...Mollo Guamani.
- “Guacas” y “adoratorios” hallados en la “Visita”, cuyos nombres
figura-ban en los originales de la misma.
50 ídolos y guacas de don Cristóbal Vichuque y de sus “indios”.
40 ídolos del kuraka Tomás Vásquez (Tomay) y “sus indios”
180 guacas e ídolos de don Juan Guancari, don Francisco Pisara Guanca
y Alonso Angasilla.
90 guacas e ídolos de Pedro Alonso Pariona, Alonso Martín Yauricopa
y de don Antonio Aymas Yoznos (habían illapas “relámpago truenos”).
57 guacas de don Francisco Chávez y sus “indios”.
30 guacas adoradas por el kuraka don Francisco Almazán Caquia Vilca
y sus “indios”.
d. Parcialidad de Hurin Rumana, relación de personas castigadas:
- Por seguidores de la “seta”: a la pena de azotamiento y trasquilamiento
público y ser “entregados a los curas” para su cristianización y “fábrica
de sus iglesias”: Diego Guaman Guarcaya; Diego Culi Yamque; Martín
Marca Guamal; Francisco Xulca Guanca; Martín Chuquis; Francisco Ancos;
Martín Vino; Damián Gauaylla Lauca; Pedro Paucachi; María Quimina,
Damián Tintayaca; María Acoma; Isabel Curi Guarmi; Damián Mayguay;
Isabel Guanay Chuque (todos muchachos); Damián Asto Monay; Isabel
Chimpoma y Francisco Poma.
- Kurakas acusados de idolatrías: a “penitencia” y condenados según
las ‘penas que aparece en el original de la “Visita”: Don Hernando
Guaman Aymara; Don Francisco Sulca; Don Pedro Cuca Guamal; Don Francisco
Usca Paucara; Don Juan Guaya Curi; Don Francisco Asto; Francisco
Guasuo Paucar; Don Carlos Quia Poma; Don Francisco Chuqui Vilca;
Alonso Guaman Turi; Alonso Usco Yaure y Alonso Queachucuna.
- Guacas e ídolos destruidos y quemados durante la “Visita”.
60 guacas de don Francisco Usca Pauca y Fernando Chuqui Paucar
30 guacas de los kurakas don Juan Guaoya Curi, don Antonio Pichataco
y de don Pedro Quro
40 guacas de don Francisco Sulca y de don Juan Camasca
60 guacas del kuraka Carlos Poma
130 guacas de los kurakas don Felipe Guaman Cauma, don José Callpa
y Francisco Chuqui Vilca.
En esta relación hemos mantenido la escritura de la onomástica y toponimia
que aparece en el descifrado del manuscrito hecho por Luis Millones
(1971), para el adecuado estudio antropológico y etnohistórico. Los
pueblos citados existen aún y muchos de sus habitantes siguen usando
los mismos nombres que figuran en la relación reseñada.
Subir